Jesús fumaba mariguana

Jesús fumaba mariguana todas las noches antes de ir a dormir, sus discípulos creían que la hierba le ayudaba sobremanera para poder crear discursos fantásticos, con metáforas incomparables, que la gente acogía de buena manera en sus sermones. La hierba, decía Jesús, al igual que el vino, alegra el corazón de los hombres y expande sus sentidos. Jesús se tiraba al pasto y observaba las estrellas, su mirada se perdía entre las nubes y el cielo oscuro, mientras aspiraba el olor de la mariguana; tirado boca al cielo, veía la cara de su padre formarse por entre las líneas que trazaban los tonos grises y los dragones de fuego azul que danzaban por las nubes, cuando estaba por llover.

Para nadie era sorpresa que la mata de mariguana se compartía entre amigos, sobre todo en los festejos y en las grandes cenas; por eso aquella noche, antes de que Jesús fuera hecho prisionero, tomo el pan y lo dividió para compartirlo entre sus seguidores, el vino se repartió también, y poco después rolo la colilla de mariguana por entre las manos de los presentes; un poco de música acompañaba la comida y Jesús recordó a su padre.

Esa fue la grandiosa despedida de Jesús Alcázar, uno de los más brillantes ladrones del siglo XVIII, quien fuese delatado por uno de los miembros de su banda al igual que su padre. Jesús, fue una de las primeras cabezas de organizaciones delictivas y gustaba de fumar mariguana por las noches.

Carlosdu