dios no existe,
y si existiera,
sería el ser
más hipócrita,
egocentrista
y mentiroso
de la creación.
Más aún que yo,
y eso que dices
que soy el peor
de los patanes.
Y yo te creo,
porque tu boca
siempre es sincera.
Pero mi amor,
dios no existe,
te lo dice este
pobre diablo
que bajó al infierno,
te lo dice este
proxeneta de poesías.
No confíes
en los libros
que no funcionan
ni como almanaques.
La palabra divina
sólo es posible
entre dos bocas
que se besan.
Mi amor,
no confíes en dioses,
no confíes
ni siquiera en mí.
Foto: I'm batman
3 comentarios:
Excelente consejo para las nenas mochas con las que luego andas, jajajaja.
Ya, en serio, creo que es una pieza interesante, me gusta la blasfemia, ya sabes, puntos por afinidad. Tienes algunas líneas bien armadas y puestas. Dentro del tema detecto algunos lugares comunes, pero justificables, creo yo, en el contexto.
Mi estimado Morita, me parece que estás perdienndo la linea que divide la poesía de las meras confesiones sacerdotales. No encuentro imágenes poéticas, ni metáforas en este escrito. Mucho cuidado con eso. Por cierto, si nos hundimos para no nadar no soñarán los peces con anzuelos; si nos rendimos para no llorar, declarará el amor huelga de besos.
Hay mi vida, que te digo, parece que lo hiciste con odio para mi jaja, pero bueno no limitare tu inspiracion. besos.
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